Dime qué color usas y te diré cómo te sientes
Los colores no sólo despiertan
nuestras emociones, sino también una variedad de sentimientos, tanto positivos
como negativos, debido a que, según las investigaciones en psicología del color
y terapia del arte, los colores se vinculan con las emociones, por lo tanto,
pueden influir en el estado físico, emocional y mental de las personas.
La frase “todo entra por la
vista”, puede aplicarse para relacionar en qué medida nos sentimos más seguros de
elegir en nuestra vestimenta diaria, determinados colores, sean éstos cálidos o
fríos. Lo que usemos entonces puede ayudarnos a sentirnos mejor, si buscamos
usar el color para nuestro bienestar.
¿Te animarías a elegir colores diferentes
a los clásicos que vienes usando?
Para ello, el psicólogo
García-Allen, presenta los significados de algunos colores que facilitan lograr
el equilibrio en nuestras emociones:
Amarillo: para sentirnos alegres, optimistas, fuertes, con poder.
Negro/gris: para adentrarnos en nuestra individualidad, pensar a
solas, estar quietos.
Rojo: puede reflejar la agresividad, pero también el cambio,
pasión, vitalidad, disposición positiva para el diálogo.
Verde: para inspirar a la relajación, la actitud ecológica,
sentirnos dinámicos, emprendedores.
Azul: para transmitir confianza, seguridad, inteligencia.
Naranja: para generar entusiasmo, actividad, ímpetu, positivismo.
Según el coach Delgado (2017), el
vestuario es el entorno más íntimo que tiene cada persona, por tanto, aconseja identificar
y renovar tu propio estado de colores, ya que asegura, “tendemos a vestirnos
por fuera cómo nos sentimos por dentro”.
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Artículos consultados:
García-Allen, J. (s.f). Psicología del color. Recuperado de:
Delgado, D. (2017). Por qué el color afecta a tu vida y cómo ponerlo a tu favor. Recuperado de: